viernes, 23 de diciembre de 2011

Las cosas que te hacen ser perfecto.

-¿Por qué?- me preguntó.
-¿Por qué, qué?
-Esto... ¿por qué estás conmigo?, ¿por qué haces que todo sea tan perfecto?

Le miré y sonreí. Después miré hacia el infinito, sin borrar la sonrisa de mi rostro. Jamás pensé que esto fuera a pasar. Él era tan diferente a mí... pero ahora era un realidad, estábamos juntos... Juntos... me encanta cómo suena.

-¡Ey!-me dijo acariciando con delicadeza mi mejilla izquierda.- ¿No vas a contestarme?

Cerré los ojos y volví a sonreír. Levanté la mirada de nuevo y contemplé esos ojos marrones tan penetrantes que tiene.

-Claro que voy a responderte, por supuesto que sí... -hubo un pequeño silencio. A él le estaba incomodando, yo lo sé... y a mí, no me gustaba demostrar con palabras lo que siento...- No eres perfecto.-le dije.- Pero eres la combinación perfecta de todas las cosas que siempre he querido en un hombre. Tienes un poquito de ésto, un poquito de lo otro, otro poquito de aquéllo... y la combinación de todas esas cosas, hacen un mucho. Esa combinación, te hace ser perfecto. Me encanta cómo eres. Me encantan tus pros, tus contras, me encanta todo de ti.

Sonrió. Aunque siempre fuera de duro, le encantaba que le dijera cosas bonitas... Me dijo que era preciosa, que quería pasar el resto de su vida a mi lado y me besó...

No hay comentarios:

Publicar un comentario